ZACATECAS.- Una escena digna de una telenovela adolescente con final trágico se vivió en la Secundaria General Antonio Rosales Flores, donde cinco estudiantes fueron hospitalizados luego de intoxicarse por… ¡un perfume con feromonas!
Sí, leyó bien. No fue gas, no fue químico industrial, fue un perfume “para atraer el amor” el que desató el caos en los baños de la escuela ubicada en la colonia Francisco E. García. Según los primeros reportes de Protección Civil, los hechos ocurrieron cerca de las 14:30 horas, cuando la dirección escolar lanzó un ¡SOS amoroso! tras detectar que varios alumnos habían quedado inconscientes, aparentemente tras experimentar con una loción corporal con feromonas.
¡Entra escena: el perfume fatal! Extraoficialmente, se dice que uno de los menores llevó el producto milagroso para probar su poder de atracción… pero lo que atrajo fueron ambulancias, paramédicos y bomberos. ¡Y vaya que llegaron rápido!
Protección Civil confirmó que los cinco adolescentes, tres niñas y dos niños, fueron encontrados desmayados en el área de los baños. Uno de los varones se reporta grave. A todos los trasladaron de emergencia a un hospital, donde, suponemos, ya les prohibieron los experimentos hormonales.
El área fue asegurada y se notificó a las autoridades educativas y de salud para iniciar las investigaciones. Mientras tanto, padres de familia ya se preguntan si será necesario revisar las mochilas en busca de armas químicas románticas.
¿Y qué demonios son las feromonas?
Las feromonas son sustancias químicas que el cuerpo humano emite para comunicarse, sobre todo en temas de atracción y seducción. Algunos perfumes prometen “encender pasiones” o “volver loco/a al ser amado”… pero en este caso, parece que lo único que encendieron fue una alerta sanitaria.
Expertos ya lanzaron advertencias: estos productos pueden ser peligrosos si se inhalan en espacios cerrados, sobre todo por adolescentes que, claramente, no están listos para jugar a Cupido con químicos.
Y aunque muchos podrían pensar que esto fue un simple incidente, la moraleja es clara: el amor adolescente puede ser peligroso… pero con feromonas, ¡letal!
¿Quién necesita clases de química cuando la secundaria ya es un laboratorio de hormonas?