INTERNACIONAL.- En una de sus primeras acciones como presidente electo, Donald Trump ha delineado un plan para intensificar las deportaciones de inmigrantes, apuntando inicialmente a más de 300 personas con antecedentes de delitos graves y violentos. La operación, liderada por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), comenzará esta semana en Chicago, según informó un funcionario federal bajo anonimato.
El zar de la frontera designado por Trump, Tom Homan, confirmó que esta acción forma parte de una estrategia nacional para “quitar las esposas a ICE” y permitir que los agentes actúen con mayor libertad. Homan enfatizó que la prioridad serán los inmigrantes con antecedentes criminales graves, pero advirtió que nadie estará exento de las operaciones si reside ilegalmente en el país.
Chicago: entre el miedo y la resistencia
La ciudad de Chicago, conocida por ser un bastión de protección para los inmigrantes, enfrentará directamente estas medidas. Desde la década de 1980, Chicago ha sido una ciudad santuario, limitando la colaboración entre su policía y los agentes federales de inmigración. Estas políticas se han fortalecido con el tiempo, incluso durante la primera administración de Trump, hace ocho años.

Brandon Johnson, alcalde de Chicago, y JB Pritzker, gobernador de Illinois, reafirmaron su compromiso con las políticas santuario. Johnson calificó los planes de Trump como “pequeños y débiles” y declaró que la ciudad continuará defendiendo a sus comunidades inmigrantes.
Preocupación entre los inmigrantes y grupos de apoyo
Grupos de defensa de derechos de inmigrantes han intensificado sus esfuerzos para preparar a las comunidades afectadas. La Coalición de Illinois para los Derechos de Inmigrantes y Refugiados ha distribuido información sobre derechos legales y establecido redes de comunicación para alertar sobre operativos de ICE. Brandon Lee, portavoz de la coalición, destacó que conocer sus derechos es clave para empoderar a los migrantes.
En una conferencia de prensa, los representantes demócratas Jesús García y Delia Ramírez llamaron a los inmigrantes a mantener la calma y a ejercer sus derechos. “Nuestra comunidad ha enfrentado retos similares antes, y sabemos cómo organizarnos”, señaló García.
Promesas de campaña en acción
Donald Trump hizo de las deportaciones masivas una promesa central de su campaña presidencial. En entrevista con NBC News, reafirmó que estas operaciones comenzarán “muy temprano, muy rápido”, aunque no precisó qué ciudades serán el foco inicial.
El plan ha generado críticas y temores entre los sectores más vulnerables, pero también ha reforzado el compromiso de activistas y funcionarios locales por proteger a los migrantes. Mientras tanto, el clima extremo que se espera en Chicago podría retrasar el inicio de las operaciones, pero no su inevitable llegada.
Preparación y resistencia
Con una comunidad inmigrante en alerta y las autoridades federales listas para actuar, Chicago se encuentra en el epicentro de un debate nacional sobre inmigración, derechos humanos y el cumplimiento de las leyes.