INTERNACIONAL.– Uno de los narcotraficantes más prominentes en México, Ovidio Guzmán, conocido como “El Ratón” y hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, fue extraditado a los Estados Unidos, donde enfrentará cargos relacionados con narcotráfico. El traslado de Guzmán desde el penal del Altiplano, ubicado en México, fue llevado a cabo por elementos de la Interpol.
Según informes de ABC News, Ovidio Guzmán fue acusado en abril del mismo año, junto con otros individuos, de ser parte de una red global de narcotráfico con influencia en los Estados Unidos.
La captura de Ovidio Guzmán en Culiacán desencadenó una ola de violencia en 2019, resultando en numerosas muertes tanto en el Cartel de Sinaloa como entre las fuerzas militares mexicanas. En respuesta a la escalada de violencia, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó su liberación para “evitar más derramamiento de sangre”.
Conocido como “el hijo más mediático” de “El Chapo” Guzmán, Ovidio había sido buscado por las autoridades estadounidenses desde ese mismo año y estaba señalado como uno de los principales traficantes de droga entre México y los Estados Unidos.
Mientras tanto, su padre, Joaquín Guzmán Loera, cumple cadena perpetua en una prisión estadounidense por cargos similares.
Ovidio Guzmán se encontraba recluido en el penal del Altiplano, hasta hoy que fue extraditado a los Estados Unidos por vía aérea en una operación coordinada con la Interpol.
El Departamento de Justicia de los Estados Unidos emitió una declaración del Fiscal General Merrick B. Garland sobre la extradición de Ovidio Guzmán:
“Hoy, como resultado de la cooperación policial entre Estados Unidos y México, Ovidio Guzmán López, líder del Cártel de Sinaloa, fue extraditado a Estados Unidos. Esta acción es el paso más reciente en el esfuerzo del Departamento de Justicia para atacar todos los aspectos de las operaciones del cártel”.
El Fiscal General agradeció a las autoridades mexicanas por su cooperación en esta extradición y enfatizó que la lucha contra los cárteles ha requerido un “valor increíble por parte de las fuerzas del orden de Estados Unidos y de los miembros del servicio militar y de las fuerzas del orden mexicanas”.
Finalmente, Garland aseguró que el Departamento de Justicia continuará persiguiendo a aquellos responsables de “alimentar la epidemia de opioides que ha devastado demasiadas comunidades en todo el país”.