NACIONAL.- Este viernes, la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados avaló en lo general y en lo particular la desaparición de siete órganos y reguladores autónomos, una iniciativa impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador y respaldada por la mayoría oficialista. La propuesta, aprobada con 22 votos a favor de Morena y sus aliados (PT y PVEM) frente a 17 en contra de la oposición, será turnada al pleno de la Cámara para su futura discusión y posible aprobación.
La reforma propone la desaparición de instituciones clave como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), entre otros. Sus funciones serían absorbidas por diversas secretarías de la administración pública, bajo el argumento de buscar eficiencia gubernamental y ahorro presupuestario, que se redirigiría al Fondo de Pensiones para el Bienestar.
Sin embargo, la oposición ha expresado fuertes críticas, advirtiendo que esta reforma podría tener consecuencias negativas para la transparencia, la competencia económica y los compromisos internacionales de México. Héctor Téllez, diputado del PAN, destacó que la desaparición del INAI eliminaría una herramienta crucial en la lucha contra la corrupción, recordando su papel en investigaciones de alto impacto en sexenios recientes.
Asimismo, la eliminación de la Cofece y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) podría distorsionar la competencia en sectores clave, beneficiando a grandes actores económicos y afectando negativamente a los consumidores con precios más altos en servicios de telecomunicaciones.
Rubén Moreira, diputado del PRI, sugirió que más que un tema de austeridad, la reforma busca consolidar un “supremo poder conservador”, concentrando más poder en el Ejecutivo a expensas de los órganos autónomos. Además, la morenista Irma Juan Carlos admitió que la reforma podría poner en riesgo las obligaciones internacionales de México, como el T-MEC, lo que ha generado preocupaciones entre inversionistas extranjeros y advertencias de calificadoras como Fitch y entidades financieras como CitiBanamex y Morgan Stanley.
